La celulitis, es un trastorno que afecta a la piel y a los tejidos subcutáneos. Consiste en la acumulación de tejido adiposo, que forma nódulos de grasa, agua y toxinas, localizándose preferentemente a nivel de la mitad inferior del cuerpo (glúteos, caderas, muslos). Puede presentarse de manera aislada o asociada a sobrepeso.
La piel está compuesta por tres capas de grasa, y la celulitis se desarrolla en la capa más superficial, que se denomina hipodermis. En ella se produce una alteración de la circulación que origina un aumento de las células adiposas, con el consiguiente crecimiento del tejido graso y el engrosamiento de las paredes laterales, que forman una especie de hoyuelos.
Los procedimientos más efectivos para eliminar la grasa localizada son los que logran romper los adipocitos -células grasas-, ya sea por vibración, calor, frío o inyección de sustancias lipolíticas y ayudan a quemarla y drenarla para evitar que se deposite en la sangre, el hígado u otra parte del cuerpo. Además, siempre deberías acompañarlos de una buena alimentación y la práctica de ejercicio diaria.
Si acompañas la aplicación de estos activos con buenos masajes mecánicos o manuales puedes solucionar la fibrosis, los nódulos, hoyuelos y depresiones que se producen en la piel por la celulitis y la mala circulación.
Este tipo de grasa que no se va con dieta ni con ejercicio. Por suerte hay tratamientos profesionales que sí realizados con constancia, junto con una alimentación equilibrada y la práctica de ejercicio diario, pueden combatir la grasa localizada y la celulitis.